sábado, 26 de marzo de 2016

estherimenta: DIY cola-cao (o como ser una basurilla)

estherimenta: DIY cola-cao (o como ser una basurilla): Me da pena, me da pena tirar un sin fin de cosas y lo que más temo es acabar siendo la vieja de los gatos pero sin gatos. Mi coc...


UNA IDEA FANTÁSTICA CON LOS BOTES DE COLA CAO. SI OS ANIMÁIS, ACEPTO REGALOS.
LAS ETIQUETAS SE SALEN

miércoles, 23 de marzo de 2016

Recuerda conmigo -botes- II



200gr.




Y como lo prometido es deuda, ahí vamos:



Dos modelos diferentes de 3kgr. El de la izquierda es enteramente en metal, sin papel de tipo alguno.



En su momento os conté un poco de este envase, así que no os voy a dar "la lata", tocan botes.



Vamos a otro formato, y os recuerdo que son los que yo tengo, por supuesto hay más modelos.



Parecen iguales,


a que sí?



Pero ya veis que no!



También de 2kgr. pero con otras promociones.



Sé que están viejines, pero es parte de su encanto.



Aquí el envase de 1kgr.


Prácticamente son idénticos


Pero aquí se ve que son de distinto año por el precio.


Son del mismo año, 1972, de 500gr.


Obvio uno está destrozado, pero aún si lo encuentro encuentro en mejor estado no lo pienso tirar. Son  44 años de historia.



Son diferentes también en su parte trasera. No sé aún porqué estas diferencias si los dos envases patrocinan los mismos juegos olímpicos.



Mi chiquitín de 200gr.


Y otro día otros pocos recuerdos más. Os espero para contar y escuchar historias de vuestras cosas de Cola cao.



Recuerda conmigo -botes- I



Hoy vuelvo con botes. Entrañables, llenos de añoranza, de aroma, de tiempo.

Una de las maneras, en que cronológicamente nos podemos acercar a ellos, es por el logotipo. Os cuento antes de mostrároslos.




La primer etiqueta...


Se ve el guión en medio de las dos palabras, uniéndolas. La marca la crea en 1946 Antonio Tusell, que así mismo crea la etiqueta. Es letra normal, cercana, familiar.  

Se moderniza un poco en 1956. En 1972 se cambian las letras, en 1975 desaparece el guión que unía las palabras. Más adelante, de la mano de la Agencia Holmes & Marchant, se hace otro retoque y ya en 1999 se moderniza para evolucionar después  al actual.

Los envases antiguos de lata, los típicos de lunares con señora, comenzaron en los años 50, ahí tenéis el ejemplo de las primeras letras del logo.

Más adelante, en los años 60 sale el bote de aluminio y papel que hoy nos ocupa, ahí el segundo.

Esto nos ayuda para saber un poco porqué época nacieron los envases que tenemos.

Las letras fueron variando del color marrón bordeado de rojo al azul con rojo y relleno de blanco. En algunos de los logos, se ve claramente como las sombras en la parte derecha de las letras buscan crear volumen, así como el sentido en qué se van girando. De esta manera, la letra familiar, se acerca más ahora a la de los niños o jóvenes ya que va apareciendo la cursiva, como algunos grafitis.

Lo que se mantiene después en el tiempo son los colores rojo, amarillo y azul. Dinamismo, vitalidad, pureza, confianza.

Bueno, vamos a los botes?








Diferentes tipos de tapa según el año y el gramaje. Recordad que ahora Cola cao pertenece a Idilia Foods, pero sigue siendo el mismo de siempre.





Esta imagen es otra muestra de la variedad de precios a través del tiempo, los años y el peso. Los míos son de 200-500-1000-2000 -3000 y 5000gr. Este último, ya lo conocéis como juguetero. No venía el cacao directamente si no empaquetado.

No están por supuesto todos, hay un montón por ahí esperando a ser rescatados del olvido, y espero que no haya ningún modelo que se haya perdido para siempre.




Y tras esta entrada presentación, os pongo otra en la que prometo poner imágenes que es lo que a la mayoría os interesa...de momento, hacedme caso. Esto os lo digo siempre: ENGANCHA!





viernes, 11 de marzo de 2016

Cuando el papel guarda momentos I I



Hoy otros pocos momentos hasta acercarnos a antes de ayer.



Una vez más el apoyo a la vida sana, pasando por el deporte se hacía patente. Una pequeña guía de como aprender varios deportes. Cada uno trataba un tema.
A mí me gusta mucho porque trae los dibujos de las personas con ropa sesentera, es retroceder a las películas de esos años y que más o menos todos hemos visto.




En todos estos libros de aquella época, se contaba con reconocidos personajes de cada disciplina.


Con el paso del tiempo, los libritos evolucionaron a pequeñas revistas con fotos a todo color. El Club Junior de Cola cao, no sólo promocionaba el cacao de la marca, también el deporte, juegos y lo más! De ahí salieron tooodas esas sudaderas, camisetas, mochilas...que no tenemos muchos y no sabíamos de qué manera se habían lanzado. Pues hala! ya lo sabéis.







También la cultura entraba en aquellos años en el patrocinio de la entonces Nutrexpa. Una colección de libros clásicos para toda la familia. Yo o era muy pequeña o no había nacido por entonces, pero cada vez que encuentro alguna de estas, para mí, maravillas, entro en éxtasis.




Aunque otro día haremos un recorrido de nuevo por pasquines, folletos, otros álbumes y la publicidad en los tebeos, ya os puse la de los suplementos de periódicos, hoy termino con la agenda, hasta donde yo sé la publicación en papel más actual.
Otro día volvemos a ese pasado de hace dos días pero que ya va camino del medio siglo deleitándonos con todas estas publicaciones y mercadotecnias.
Es cuestión de tiempo, aunque vuele, el hacer más grande nuestra colección. Y también para los que simplemente os gusta recordar, que no es poco. Es no dejar que el tiempo borre nuestros sentimientos.








jueves, 10 de marzo de 2016

Cuando el papel guarda momentos I


Alguna vez os he hablado de los libros de la marca, de agendas, folletos...Hoy vamos a dar un repaso por unos pocos y mañana otros pocos más.


Este en concreto es uno de mis favoritos. Es pequeño, poco más que un sobre corriente tal vez, pero trae un montón de información sobre la marca. Desde la etiqueta, imágenes, CAJASSSSSS, ya sabéis, mi debilidad.


Como ejemplo, despliego la página del Vit. El prototipo que no llegó a salir y el que salió si no recuerdo mal, en Baleares.



Siento tener que tapar algunas imágenes o distorsionarlas, pero así son las cosas!
De todos modos, menos es nada.

El libro de los sellos era para mí un enigma. No me había percatado que los sellos de la colección no son sellos especiales, al contrario, sellos normales de correos. Lo mejor, es que aún me quedaban sellos de una colección que hice en la niñez. Para mi suerte, estos eran algunos de los que me gustaban, y seguían en casa. De mi hermano a mí y de mí a mi hija.


Os pongo esto de ejemplo. Ojo a esos que se venden en internet! No todos son de este álbum. Aquí los sellos van en horizontal. Veis el hueco arriba? Os indica qué sello es y ya se ve si es vertical u horizontal.



 Y el osito Misha? Qué chiquitines éramos algunos. Bueno, algunos ni estabais. Este álbum era muy popular porque venía directo con el Cola cao, por eso muchos lo teníamos. Os cuento algo personal:
Yo nunca tiro un libro. A veces llevaba al colegio para la biblioteca, se lo daba a conocidos para que lo vendieran, cosas así.
El caso es que este libro lleva conmigo mucho, y cuando empezó la colección de cajas a crecer, tuve que hacer sitio. Suerte tengo una hija que vale dos Potosí, y lo guardó. No hace tanto lo sacó del trastero porque me volvía loca buscando. Ya creía lo había dado. Y ahí estaba! Y aquí os lo muestro.



Está distorsionada la imagen, pero se aprecia bien. Venían lso cromos en varios formatos y tamaños. Las imágenes de olimpiadas, un reto cuando eres un niño y tu interés está despierto y abierto.

Un libro con contenido rico! Aún se puede adquirir en librerías.Pasta dura y si se mancha, se puede limpiar!

Bueno, para que os hagáis una idea. Es muy rápido y fácil de aplicar lo que trae.

Lo que os decía, no se permite divulgar el interior,  pero es un libro también de tamaño pequeño, pero trae un montón de cosinas ricas y ligeras.




Algunos recordaréis momentos de infancia, esas pequeñas cosas
que de repente decimos:
-vaya! no me acordaba, cómo lo pude olvidar?


Otros, pasaréis un buen rato viendo qué variedad de publicaciones nos enseñan, desde como esquiar o practicar algún deporte, hasta como comer sano.
Y mañana, más.