lunes, 18 de enero de 2016

Lata Vintage Azúcar




Ahora sólo queda por subir una lata vintage. La penúltima es esta de azúcar. Viejita, pero una de las series más delicadas para mí.
Os recuerdo que esta es de las que si se lavan inadecuadamente se quedan sin dibujo y sin color. Alguien debió decírselo a la persona anterior, y me consta casi fijo que no fue su dueño.

 


Supongo que por la limpieza "exhaustiva" a la que le sometieron no es del mismo tono apagado que la que tiene señora. La de sin señora es del 72 y la otra supongo anterior. Esta está muy deterioradas, pero hasta que renueve me parece perfecta...



Creo que con tiempo, debo ir subiendo un resumen de envases de metal y así no hay que andar dando vueltas para buscarlos por el blog.

Agendas, escritorio, bares...lugares para un Cola cao? Seee!



Preciosa libreta para bares. Es de Jose, en Zaragoza. Desde luego una preciosidad que me alegro comparta con nosotros. Los servilleteros son de Almería 2012.




Otra perspectiva. Simula el paquete de sobres de 18 gr. de los bares, o puede que un servilletero.


Aquí junto a algún modelo de taza, vaso y botella que aún hay en algún local.


Y para olvidadizos y nos, esta agenda vintage de 2016. Si no os dais prisa las recogen en nada.



Otras cosinas de escritorio. Calculadoras, no conozco si hay más modelos y capuchones de lápiz, así como enrollable de bolígrafo.


Plumier, capuchones puestos, estuche en plástico con apertura superior, imitando el bote clásico y estuche en tela con apertura normal.



Una libreta que venía de regalo con las compras de supermercado, para las botellitas de plástico. Un plumier de metal, y colores de propaganda, 6. también pude haber metido aquí los rotuladores gruesos de las tazas para personalizar, pero esos los dejaré para esa sección.


Y tanto para bares, como para casa, no podían faltar los bolígrafos, el ratón de ordenador, eso sí, de clavija, a ver si sacan para puerto.
Los botecitos son afilapuntas. Cambia el color de la zona de la cuchilla, el resto son iguales.




sábado, 2 de enero de 2016

Phoscao..poderoso reconstituyente






Cola cao no surgió de la nada ni fue por supuesto la primer marca de cacao famosa.



Antes, mucho antes, allá por el año 1914 ya existía el Phoscao, así lo atestiguan las publicidad en España, aunque era un producto de tirón en Francia. En 1921 aparece registrado en sanidad.  Se vendía en farmacias y los botes, ya de por sí casi todos pequeños, indicaban que era más grande  el envase de lo necesario para evitar apelmazamientos.


En 1912 la publicidad nos habla de su predecesor, ya dicen por algo que está todo inventado, el Phospho-cao, también triunfante en Francia.

Se vendía como producto reconstituyente para estómagos, cansancio, y "todo tipo de milagros" Se comparaba a los productos con proteínas animales y una vez hecho el milagro de la cura, se recomendaba como "golosina"

Por supuesto tampoco el mandar el producto gratis para la prueba o el hacer distintos regalos  era cosa de nuestros tiempos.

Incluso lo que yo comparo con las actuales Baticaos de Cola cao existía en forma de vaso agitador ya por gentileza de Phoscao, pay pays de cartón, gorritos y un sin fin de propagandas que demuestran lo que os digo.

Tenían cosas tan curiosas para aquella época como estos tebeos. Pinchando en el enlace podéis leer toda la información.
 
En 1964 Nutrexpa compra la competidora Phoscao y desde entonces esta marca desapareció, aunque en la forma de los pastelitos Phosquitos, que muchos recordarán, se mantuvo el nombre. 
Y muchas promociones después, aquí estamos un puñado de coleccionistas o seguidores de las aventuras del cacao que nos ocupa.



Para finalizar os dejo la canción del Phoscao, que también la había.

Canción del Phoscao


Ese chico que juega, tan fuerte,

mete goles sin cesar;

su secreto reside, señores,

en la forma de desayunar.

Desayuna su Phoscao con leche

y  también al merendar;

y el primero en el juego y la clase,

ahora ya no se puede dudar.

Tome el  Phoscao,

poderoso reconstituyente,

pues el Phoscao

da alegría y salud de repente;

don Wenceslao

con Phoscao desayuna también

y lo toman sus hijos y nietos

y  tiene más años que Matusalén